Simulación abstracta de imágenes de la Capilla Sixtina (La Creación). La obra representa una vista de una arquitectura en la que se ofrece una parte de la cúpula, un arco de medio punto y parte de las pechinas. La cúpula y las pechinas están decoradas con una pintura mural en la que se representa el cielo repleto de personajes celestiales y religiosos que parecen asomarse al interior del edificio. Sobre las figuras el autor ha dibujado trazos negros que a veces se corresponden con las siluetas de los personajes, mientras que otras veces son más libres, dotando a la obra de un carácter paródico y caricaturesco. Se crea gran contraste entre la parte superior de la obra, en la que predomina el azul del cielo, y la parte inferior, en tonalidades oscuras.