Sobre fondo arquitectónico definido por la presencia del fragmento de una pilastra sobre la que cae un dosel verde, aparece representado de tres cuartos y sedente sobre sillón moldurado Pedro Virgili. Vestido con chaleco floreado, casaca y camisola de puños de encaje blanco, reposa sus brazos, extendidos al frente, sobre una mesa en cuya parte posterior figuran libros, material quirúrgico y de escritura. En la mano izquierda sostiene un documento con encabezamiento y pie y en la derecha sujeta la planta del anfiteatro anatómico de Barcelona encuadernada en un libro. La cabeza, girada al frente y tocada con peluca blanca de rizos laterales, muestra los rasgos de un hombre grueso, de amplia boca y mirada escrutadora dirigida al frente. La composición mantiene las formas estables propias del retrato, recibiendo la luz desde el lateral izquierdo lo cual genera diferentes planos de profundidad.